Con el inicio de las vacaciones cambiamos nuestros hábitos de vida. Los viajes y el aumento de vida social pueden conllevar más cansancio; además, con el calor y las altas temperaturas nuestro cuerpo sufre mayor riesgo de deshidratación y tiende a retener líquidos. Te contamos qué nutrientes debemos tener en cuenta para aumentar la energía, combatir la retención de líquidos, mejorar la circulación sanguínea y, por supuesto, cuidar la piel y protegerla del sol.
Con la llegada de la primavera los días cada vez se hacen más largos y nuestro reloj biológico se resiente. Las hormonas se desequilibran y gastamos más energía interna para reajustarnos, lo que aumenta la sensación de cansancio y falta de vitalidad que conocemos astenia primaveral. Asegurar el aporte de ciertos nutrientes pueden ayudar a conseguir el extra de energía que necesitamos.
Con la entrada de la primavera a la vuelta de la esquina, dentro de unos días, se puede acentuar la sensación de cansancio y falta de vitalidad, lo que popularmente conocemos como astenia primaveral. Se trata de un trastorno temporal que, en algunos casos, puede acentuar el cansancio y la falta de energía que podemos tener de manera general.
La vitamina C se conoce sobre todo por contribuir a la salud de nuestro sistema inmunológico, pero son muchas más las funciones que realiza en el cuerpo. Curiosamente, las concentraciones más altas de esta vitamina se encuentran en el cerebro y protege a las neuronas del estrés oxidativo e induce a la diferenciación y maduración de las neuronas, entre otros. Todas estas funciones convierten la vitamina C en un nutriente esencial para mantener una buena salud mental.